Preámbulo
No pretendo con el presente escrito dar escusas de mis faltas, ni profesar mi descontento a la adversidad que me ha tocado. Me disculpa el leyente por darme el atrevimiento de tener que utilizar párrafos que permitan presentar mis ideas con las cuales no he podido explicar mi razón, utilizando mi voz poco elocuente y que mi mirada no pueda ser comprendida de pupila a pupila sin que se alce la voz y esa pregunta escondida que presenta mi interlocutor. Por lo que cualquier duda que surja suplico me comente y aclarar en el instante esa turbe que se hace con la presente.
Capítulo I
Sentado, bajo la luz de una linterna con el fuego separado de su fuente de vida escondo bajo un rostro semi frío los pensamientos que se yacen dentro de mí.
Son esas voces, las que acalorados revolotean dentro de mi cuerpo, tocando las puertas de mi mente y en mente acciones que no logran sopesar en las ideas correctas que intrínsecas están allí esperando la oportunidad de poder salir y propagar esa intención. Es que acaso el miedo sobrepasa mi imaginación? O será que la pobreza de espíritu es mi mas malévolo defecto?
Para cualquiera que sea la respuesta, me parece que no solo es una, sino mas bien una combinación que ha alcanzado la parte mas importante de todo ser humano, y en mi ser un acto suicida, la desolación. En verdad he buscado la cura para mi mal que padezco desde la inocencia, quizás no con la persistencia que amerita el acto, pero si en cada faceta de mi vida en las que no he alcanzado la satisfacción de ser mas que ser humano que no pasa de ser una copia del patrón altamente difundido de esta isla a la que se le llama tierra.
A tempranas horas de mi vida sobrellevé un carácter del cual he pretendido desviarme y reparar el mal que acoge a esta alma, segui las reglas hasta donde se me a permitido aún cuando esto implico enterrar cualquier signo de imaginación, que ahora con un buen uso de razón, sé que es lo que diferencia en esta vida. Más no solo con el hecho de tener una imaginación mas allá de la realidad se logra es éxito, como lo han sido grandes mentes de cercas de siglo, un Albert Eisntein que se casó N veces y que sus dotes no fueron suficientes para poder alcanzar la estabilidad en la vida. Y es que la naturaleza no esta hecha de perfecciones como se pudiera razonar, esta labrada con las pruebas y los errores que esculpieron los cimientos para que se asemejara a la perfección, y no solamente fue en un solo momento en que se realizó la hazaña, le tomo mas tiempo de lo que se pudiera pensar.
Escudriñando los escritos, que antes, personas escribieron hacia mí sus sentimientos, reparo en decir ¿donde se enterró aquello que plasmado en papel quedó?, por que en su momento fue lo más normal, mas hoy parece suicida que esas palabras cobraran vida después de éste, un segundo en el universo... vida. Será que es certero la existencia del chakra y que el sentimiento se renueva en nuevo sentimiento o es solo que el objeto cambia de forma, y el rostro luce diferente, pero la experiencia es la que queda.
