Tercer Dia

El segundo dia, despues de que la gente se habia tomado parte de la noche para celebrar, nos levantamos tarde. Desayunar un coctel de fruta y un jogo de naranja, charlar con los venezolanos, ir a la torre para ver la charla de bienvenida que cuando llegamos ya habia terminado asi es que nos regresamos, llegue a saludar a la mara del churro, charlamos un rato, dormir, me llegaron a tomar fotos, un video cuando recien me estaba levantando (por que no traje una camara!! Grrrrr). Bueno regresamos a ver la charla de OpenSolaris que estuvo aburridisima.
Llegamos a almorzar, comer chiles, pero al parecer como que habian problemas con lo des tickets y eso nos concernia, ya que no habias puesto nuestra fecha de llegada con anticipacion, nos habian puesto en la lista negra de negarles la comida y como el gato llegó tarde a la comida lo rechazaron, claro Martín como a persona que es le hizo la compañia al mercado a almorzar, nosotros despues de comer fuimos a ver donde estaban, en realidad fuimos con el churro por que lo mismo le habia pasado a Monge y al Cabezón. Encontramos a martin, vimos unas tortillas negras hechas de maíz negro, ademas de unos chapulines (grillos que llegan a las milpas) tostados con limón, que sabian a camaron, de probar el pulpe curado, una bebida fermentada de maguey, creo, con piña que estaba aceptable, encontramos a la mara. Bueno regresamos pero no a tiempo de ver a Enrico, uno de los desarrolladores de Debian en Italia que el dia anterior habia dadod una charla de "Mi vida con el Software libre" una charla aburridisima que con el como expositor se habia vuelto chistosa. En esta oportunidad Enrico daría una charla sobre "Herramientas avanzadas para perder el tiempo", claro como nos ibamos a perder esa charla, pero nos la perdimos. Bueno la tarde paso sin ninguna novedad excepto por el detalle de que tutila y no C quienes mas se habian dado una vuelta para concer el lugar, depsues en grupo fuimos a cenar al mercado, pues claro ya no teniamos entrada para la comida gratis (y el churro que no pierde oportunidad de probar la verdadera comida mexicana). Fue un grupo bastante numeroso, diez salvadoreños, dos mexicanos y despues en la mesa se agregaron cuatro venezolanos. Regresamos y a ver que haciamos, por que estamos preparando los contactos poara realizar un evento en El Salvador. Pero sin olvidar la fascinacion de Tavo por el Sake, por que nos japoneses llevaron una botella de sake y nos dieron una probadita.. y en verdad estaba buena... quiero mas sake..
Regresamos a dormir pasadas las doce.